CARME MORENO29/01/04 0:00
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Los vecinos y políticos de Binissalem presentaron un total de 33 propuestas en el primer debate sobre el estado del pueblo, celebrado el pasado martes en el Teatro Municipal, al que asistieron un centenar de personas. Fueron pocas las intervenciones que realizó el público durante las tres horas que duró el debate. Las propuestas, que se han de ejecutar durante 2004, serán debatidas en los plenos municipales. El PSOE presentó 20 iniciativas, el PSM ocho y el público cinco. Los Independents de Binissalem y el Partido Popular no presentaron ninguna ya que confiaban hacerlo en la segunda convocatoria que, en principio, estaba prevista para hoy, pero ha sido anulada ya que el debate finalizó el martes.

Una de las propuestas más interesantes fue la planteada por una vecina respecto a los problemas con los jóvenes que se reúnen en la Plaça de la Constitució provocando ruidos y basuras. La ciudadana planteó la necesidad de que «se hable con los padres con el fin de encontrar una solución» y pidió que se instalen más papeleras. Entre las propuestas del PSOE destaca la ejecución de la reforma de la carretera de Pedaç y la construcción de una rotonda para acceder al polígono industrial, la puesta en marcha del plan de recogida selectiva, el inicio de la primera fase del servicio de policía local durante 24 horas, la ejecución de la reforma circulatoria y la puesta en marcha del bus joven.

Entre las iniciativas del PSM, Antonina Ferrà pidió «la recalificación en suelo rústico de la segunda fase del polígono, una escoleta municipal de nueva planta y la creación de un parque lúdico en la plaza de la nueva urbanización de sa Coma». Durante el debate sobre el estado del pueblo cada partido de la oposición tuvo alrededor de diez minutos para hacer balance del inicio de legislatura y realizar un análisis crítico del trabajo realizado por el PSOE. Después las intervenciones de cada uno de los partidos llegó el turno de las réplicas y contrarréplicas dirigidas por el alcalde. Entre las cuestiones que más preocupan a la oposición es el traslado de la empresa Buades al polígono industrial. En este sentido, el portavoz del PP, Jeroni Salom, recriminó al alcalde que «no nos ha dejado intervenir en las negociaciones». La reforma circulatoria y las averías en la red de suministro de agua potable fueron otras cuestiones que pusieron sobre la mesa.