Un vecino demanda al Ajuntament por permitir hacer una finca ilegal en la costa

Según la denuncia presentada ante el Juzgado Contenciso-Administrativo número 2 de Palma, la propietaria del inmueble solicitó la licencia de construcción de una vivienda plurifamiliar (dos alturas y seis pisos) el 4 de marzo de 1988. Para poder ejecutar el proyecto necesitaba entonces una autorización de Comandancia de Marina que consiguió en agosto del mismo año. Sin embargo, antes de recibir este permiso, en el mes de julio, la titular renunció al proyecto de plurifamiliar y anunció al Ajuntament su intención de construir una «vivienda unifamiliar» pero «nunca presentó el proyecto ni documentación alguna». El denunciante añade que, en cualquier caso, la validez de la autorización de Comandancia de Marina «era de 720 días». Además, según la Ley de Cotas que entró en vigor en esas fechas las autorizaciones otorgadas previamente por la Comandancia caducaban a los dos años, es decir, en 1990.

Sin embargo, siempre según el texto presentado en los juzgados, casi 10 años después (1997) la titular «solicitó al Ajuntament de ses Salines nuevamente la licencia de construcción para un edificio de viviendas plurifamiliares». Para ello se necesitaba una autorización de la Dirección General de Costas y Puertos del Govern balear pero la solicitante adjuntó la autorización dada por la Comandancia de Marina en 1988. Al mismo tiempo, Demarcación de Cotas realizó un informe desfavorable porque el edificio «se construye en zona de protección».

El denunciante que pide la demolición de la finca, opina: «Algo raro sucedió en 1997 para que le dieran la licencia».

El alcalde de ses Salines, Sebastià Vidal, explicó tras consultar con el departamento de Urbanisme que «la licencia se dio en base a las autorizaciones pertinentes».