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Los alcalde de Campanet y Búger, Francesc Aguiló (PSM) y Manuel Patiño (UM), respectivamente, se han sumado a la petición del Ajuntament de sa Pobla que ha ofrecido a la Delegación de Gobierno los terrenos del Escorxador municipal para que se construya un nuevo cuartel de la Guardia Civil, que dará cobertura a estos tres municipios. Las actuales dependencias que utiliza el cuerpo de la Benemérita se encuentran deterioradas y se aconseja que en su interior no viva nadie. De hecho, el pleno del Ajuntament de Campanet ya ha aprobado por unanimidad en el pleno de la noche del pasado martes adherirse a este acuerdo adoptado en el plenario municipal de sa Pobla. Asimismo, según indicó ayer el alcalde de Búger, el equipo de gobierno municipal (UM-PSM) quiere debatir esta cuestión en el pleno del próximo viernes.

El Ajuntament de sa Pobla propone «ceder al Ministerio de Interior, a través de la Delegación de Gobierno, los terrenos del edificio del Escorxador, que son de titularidad municipal para que se pueda construir un nuevo cuartel para la Guardia Civil». «Se ruega al Ministerio de Interior que responda a este ofrecimiento con la mayor urgencia posible», añade el Ajuntament de sa Pobla. Por su parte, tanto el alcalde de Campanet como el de Búger destacan la necesidad de que se construya un nuevo cuartel, ya que «las actuales dependencias se encuentran en mal estado y se requiere una actuación». Esta petición que hace el Ajuntament de sa Pobla al delegado de Gobierno, Ramon Socias, ya fue presentada a su antecesor en el cargo, Miquel Ramis.

El último pleno del Ajuntament de sa Pobla aprobó una propuesta para ceder al Ministerio del Interior del Gobierno central los terrenos del matadero de sa Pobla para construir en ellos un nuevo cuartel para la Benemérita dado que las actuales instalaciones se encuentran en un estado deplorable. Esta no es una situación nueva para este cuerpo. En Inca, la Guardia Civil espera desde hace años un nuevo cuartel mientras continúan trabajando en las instalaciones del cuartel general Luque, cada vez más deteriorado. En estos momentos, la construcción del nuevo cuartel está bloqueada por la falta de acuerdo acerca de unas modificaciones del proyecto entre la empresa constructora y el Ministerio.