De hecho, estos días el consejero delegado de Saga, Claude Ries,
ha viajado a Asia para negociar la eventual inyección de capital ya
que el grupo catalán ha notificado a Saga que si el próximo lunes
15 no ha hecho efectiva la aportación de los 4 millones de euros,
denunciarán el acuerdo de compraventa de acciones con el fin de
intentar recuperar el control de Line Invest. Uno de los motivos
que se apuntan sobre la negativa de Saga a realizar la aportación
de capital, es que tenía la intención de vender antes los terrenos
de Majórica y posteriormente llevar a cabo la inyección. Sin
embargo, se hace difícil la venta del inmueble porque debe
cumplirse antes y de forma íntegra el convenio de acreedores.
A este ultimátum lanzado por Español a Saga, hay que añadir el
que dio la semana pasada el Govern a Majórica por el incumplimiento
del protocolo firmado el pasado mes de julio y según el cual la
empresa se comprometió a aportar los 4 millones de euros. Este
aviso expira el 22 de noviembre.
Pese a que la empresa Majórica no ha confirmado la venta del
solar de la manzana de la fábrica, existen unas cinco empresas o
grupos inmobiliarios y financieros interesados en la adquisición de
los terrenos. La firma de una opción de compra está bastante
avanzada con el grupo Rustic.
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