El proyecto de la autovía Inca a sa Pobla se tendrá que modificar
para evitar que son Pons en Campanet se inunde. Estas son las
conclusiones de los técnicos de la Conselleria de Medi Ambient del
Govern después de que los vecinos de la zona insistieran en que las
canalizaciones que se realizan no son correctas.
Son Pons es un punto que recoge aguas subterráneas. Por esta
zona pasan las aguas de un afluente del torrente de Sant Miquelet y
a veces se producen inundaciones a causa de las lluvias.
El director de Proyectos de la Fundación Voltor Negre en son
Pons, Juan José Sánchez, explicó ayer que «las obras se hacen sin
tener en cuenta las inundaciones y esto puede provocar inundaciones
en la autovía, la gasolinera, o bien, afectar al transformador de
Gesa».
Lo cierto es que la desembocadura del agua ha provocado una
cierta preocupación entre los vecinos. Así, epobler Miquel
Rosselló, que tiene una finca en son Pons, decía ayer: «No entiendo
nada; no sé qué ideas tienen. La solución está en la construcción
de un buen desagüe».
Entre las soluciones, los técnicos apuestan por la mejora de la
desembocadura de las aguas, que ahora tienen una salida indefinida.
Señalan que se tendrá que reforzar la zanja que bordea la parte
trasera de la gasolinera y el tramo de la acera paralelo a la
carretera actual.
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