TW
0

A los vecinos del pequeño núcleo rural de Ruberts, constituido por apenas veinticinco casas en el municipio de Sencelles, les cuesta comprender que se quiera llevar adelante la construcción en el mismo llogaret de una urbanización de catorce chalets adosados. Consideran que no existe ninguna razón justificable para generar este incremento poblacional en el lugar con un proyecto que acabaría totalmente con la singularidad y el paisaje rural de Ruberts.

Una recalificación de terrenos llevada a cabo por el Ajuntament de Sencelles permitió hace unos cinco años que comenzase la urbanización y se llegaron a construir tres chalets. El resto se encuentra paralizado de momento, porque por entonces los vecinos se agruparon en una asociación e interpusieron un recurso contencioso administrativo contra la decisión del Ajuntament. Una sentencia les dio la razón en primera instancia, aunque el Ajuntament de Sencelles ha recurrido el fallo.

El pasado sábado, la Associació de Veïnats de Ruberts celebró por cuarto año consecutivo una fiesta reivindicativa para pedir la paralización total del proyecto, la protección dellogaret, y «para demostrar que seguimos vivos», según explicó uno de los organizadores. «Sabemos que tenemos la razón. Nadie puede entender que en un sitio como éste se justifique construir catorce chalets adosados con piscina. La recalificación superaba el porcentaje de crecimiento según el suelo urbano que ya había aquí, y además se ocupaban zonas verdes», explicaron durante la fiesta.