La gerente del Institut Balear de Sanejament (Ibasan), dependiente
de la Conselleria de Medi Ambient, Bàrbara Mestre, acudió ayer a
Binissalem para reunirse con una quincena de vecinos afectados por
la contaminación de sus pozos. Mestre, acompañada por técnicos del
Ibasan, quiso lanzar a los presentes un mensaje de tranquilidad
asegurando que «no hay contaminación de las aguas subterráneas por
metales pesados», según las analíticas realizadas por la
Conselleria.
De esta manera, se descarta lo que más se temía, que las aguas
de los pozos pudieran estar contaminadas por metales pesados
dañinos para la salud. A pesar de todo, los vecinos mostraron su
intranquilidad, ya que «hace tiempo vinieron a hacer análisis y
hasta hoy no sabemos nada de nada de los resultados y nadie nos
dice si nuestros animales y nosotros podemos beber agua».
A éstas preguntas, los técnicos contestaron que «quien
finalmente debe autorizar el consumo de esta agua es Salut». De
esta manera, el concejal del PP Jeroni Salom se comprometió a
realizar los trámites con la Conselleria de Salut para que realicen
nuevos análisis a todos aquellos vecinos que lo soliciten. Por su
parte, el portavoz de los ecologistas de Gadma, Bernat Fiol,
reclamó al Ajuntament «que intervenga urgentemente porque la
empresa Buades hace muchos años que contamina las aguas residuales
que llegan a las lagunas y a sus fangos».
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