Calvià y Campos son los únicos ayuntamientos de Mallorca que no
pagan por el servicio de los bomberos al Consell. El resto de
municipios cumple religiosamente con sus obligaciones de pagar a la
institución insular el uno por ciento de sus presupuestos a cambio
de la intervención de Bombers de Mallorca en caso de emergencia,
según consta en el convenio suscrito en el año 84 entre ambas
instituciones.
El impago de la cuota por parte de los ayuntamientos de Calvià y
Campos responde a motivos diferentes. Calvià es el eterno moroso
por este concepto. El conflicto con este municipio persiste desde
hace mucho tiempo y, aunque en el año 2000, se llegó a un acuerdo
para resolverlo, la administración local continúa sin pagar. María
José Rodríguez, directora insular d'Emergències, explicó ayer a
este diario que el último acuerdo alcanzado con Calvià preveía el
pago del 50% del coste anual del parque de bomberos de Calvià. O
sea, tendría que pagar en torno a 800.000 euros anuales, que no
abona desde 2002. La deuda del Ajuntament por los cuatro últimos
años de impago se eleva ya a unos 3 millones de euros.
Calvià ya sumó una deuda de 4,5 millones de euros entre los años
1990 y 1999. No estaba de acuerdo con la fórmula de pagar el 1 por
ciento de sus presupuestos ya que, en total, aportaba más del 30
por ciento del coste del servicio en toda Mallorca. Al final, el
Ajuntament optó por presentar un contencioso administrativo contra
la deuda que reclamaba el Consell de Mallorca.
Las actuaciones de los bomberos del Consell en Calvià son
frecuentes. En 2004, se contabilizaron 452 siniestros.
En Campos, el problema es diferente. Campos nunca suscribió el
convenio con el Consell para que los bomberos de Mallorca actuaran
en caso de emergencia. En los años 80 no se firmó porque el
municipio contaba con un bombero que intervenía en los siniestros.
Después, el Consell negoció con los diferentes ayuntamientos pero
ninguno quiso suscribir el convenio.
A pesar de todo, Bombers de Mallorca interviene cuando hay algún
siniestro y no pasa factura. «Trabajamos con material sensible. No
podemos dejar de actuar porque el ayuntamiento no pague», afirmó
Rodrígez.
Campos, gobernado por Andreu Prohens (PP), no es de los
municipios dónde más siniestros se registran. Aún así, en 2004, los
bomberos intervinieron en 51 sucesos, en casi tantos como en Son
Servera, Pollença o sa Pobla.
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