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La Conselleria de Medi Ambient del Govern de les Illes Balears ha instalado 50 nuevos fondeos en aguas de Pollença, frente a la Fortaleza, utilizando un sistema pionero en Europa mucho menos dañino para las praderas de posidonia que los tradicionales muertos de hormigón.

Se trata de unos tornillos de 3 y 4 metros de largo con una base de 60 centímetros de diámetro aproximadamente que quedan fijadas a la arena o a la posidonia de manera que las cuerdas no llegan a tocar el fondo, gracias a un flotador.

El fondeo de embarcaciones será gratuito durante los próximos dos años, periodo durante el cual se probará el nuevo sistema, que se enmarca dentro de un programa Life financiado por la Unió Europea. Tras ese periodo de prueba, corresponderá al Ministerio de Medio Ambiente del Gobierno central decidir si mantiene los fondeos y de qué manera los gestionará.

Los fondeos de Pollença entrarán en funcionamiento a partir de julio y posteriormente se instalarán también en Formentera. En total, serán 620 nuevos fondeos los que se creen en toda Balears distribuidos en Pollença (50 boyas), Porto Petro (40 boyas), Sant Elm (90 boyas), Cala Blava (70 boyas) y Formentera, en lugares aún por determinar aunque no todos ellos tendrán el sistema ecológico y es que no es viable sobre roca.