«El paisaje urbano, aunque tenga indiscutiblemente un aspecto urbanístico es un concepto medioambiental que responde a una consideración cultural, estética y de seguridad de la ciudad», dice la moción. Los socialistas consideran que los planos urbanísticos son insuficientes para proteger el paisaje urbano de la ciudad y, por eso, apuestan por una regulación específica que controle lo que denominan «agentes potencialmente contaminantes».
Según lo socialistas, esos agentes contaminantes del paisaje urbano son los que afectan a las fachadas de los edificios y escaparates como la publicidad exterior de los comercios, las alarmas, los aparatos de aire acondicionados, las antenas, etc. Con la moción que se debatirá el viernes en pleno el grupo socialista quiere implantar todo un conjunto de medidas «que permitan preservar la tipología arquitectónica tradicional de la ciudad».
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