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PEDRO AGUILO MORA
El PP consiguió ayer en Andratx los mismos siete concejales que hasta ahora le han permitido gobernar en solitario el Ajuntament.

No obstante, la explosión demográfica experimentada en el municipio durante los últimos cuatro años y el subsiguiente incremento del número de concejales en el pleno (de 13 a 17), no le ha permitido a Jaume Porsell (PP) seguir gozando de mayoría absoluta. La puesta en liza de cuatro nuevos concejales en el salón de plenos ha beneficiado enormemente a PSOE, PSM y UM.

La formación socialista se ha apuntado dos de estos cuatro ediles, mientras que las dos formaciones nacionalistas se ha repartido uno cada uno. De esta manera, el PSOE ha pasado de tres a cinco concejales, UM de dos a tres, y el PSM de uno a dos.

Los capítulos de corrupción urbanística vividos en el municipio en los últimos tiempos no han propiciado tanto el vuelco electoral experimentado, como el incremento de abstencionismo registrado.

En 2003 el índice de participación fue de un 72,1 por ciento y este año a bajado hasta el 66,6. Es decir el nivel de abstencionismo de entonces fue del 27,8 por ciento y ahora ha sido del 33,6.

En cuanto a las variaciones en el número de votos obtenidos por las formaciones que han concurrido a la urnas andritxoles, éstas no han sido ciertamente espectaculares. El PP ha ganado 150 votos con respecto a 2003, el PSOE 200, UM no llega al centenar y el PSM logra conquistar ciento y pocos más.

Por otra parte, el ex alcalde Eugenio Hidalgo ejerció ayer su derecho al voto y en declaraciones a Ultima Hora Punto Radio anunció que había votado al PP y añadió que convocará una rueda de prensa para ofrecer explicaciones sobre su detención y para que la gente «sepa quién es Eugenio Hidalgo».