El alcalde Joan Cerdà (UM) ayudó ayer a izar la bandera y explicó que de cara al año que viene se destinarán esfuerzos para que la playa de Albercuix, la única no virgen que no cuenta con este distintivo en el término municipal, ayude a aumentar la lista de banderas azules que hasta el año pasado sólo tenían las dos playas de Cala Sant Vicenç (Cala Molins y Cala Barques) y la playa de Formentor.
«Queremos tener las mejores playas de la Isla y, por eso, continuaremos invirtiendo para mejorar la calidad del agua mediante obras de saneamiento. También va a ser importante ir vigilando que el agua que sale de la depuradora sea de calidad», dijo ayer Cerdà, que aprovechó para reconocer el trabajo realizado por los dos últimos concejales de Medi Ambient Gabriel Cerdà (PSM) y Joan Comes (PP) para lograr la bandera azul.
La playa dels Tamarells está gestionada por la Asociación de Vecinos del Port de Pollença. Su presidente, Miquel Cifre, explicó ayer que el año pasado destinaron mucho dinero a comprar las máquinas necesarias para mantener esta playa limpia.
El Ajuntament de Pollença, por su parte, se ha encargado de crear dos puntos de muestreo homologados por la Unión Europea y ha llevado a cabo actividades de educación ambiental e instalado servicios públicos como duchas y baños, algunos pendientes aún de los permisos definitivos para su ubicación.
El actual concejal de Medi Ambient, Jaume Plomer (PSOE), aprovechó para mostrar ayer los folletos editados por el Ajuntament en cuatro idiomas y en los que se explican los recursos que tiene cada playa, incluidas las vírgenes.
Dichos folletos, diseñados por el ex concejal Joan Comes (PP), incluyen un mapa que indica el número de socorristas que hay en las playas, los horarios de los servicios y recomendaciones generales sobre los servicios.
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