La Confraria de Pescadors de Cala Rajada, construirá quince viviendas para sus socios en un solar de su propiedad en Cala Rajada. De esta manera quince familias de pescadores que en la actualidad no disponen de una vivienda propia tendrán la oportunidad de adquirirla a un precio más asequible que el de mercado.
Esta iniciativa guarda similitud con la oferta de viviendas de protección oficial, pero en este caso no es ninguna institución pública la que los lleva a cabo sino la misma Confraria de Pescadors de Cala Rajada, que de esta manera ayudará a sus socios pescadores.
El secretario de la Confraria, Jeroni Ferrer, señaló que «la Confraria contaba con este solar y solicitamos el cambio de usos al Ajuntament de Capdepera y al Consell de Mallorca, y ahora estamos pendientes de la licencia para iniciar las obras que esperamos poder empezar a finales de este mismo año o a principios del que viene».
Ayuda
Ferrer también dijo que «con la construcción de estas quince viviendas lo que pretendemos es ayudar a los pescadores o a sus hijos a adquirir una vivienda en Cala Rajada, con una ayuda muy importante puesto que así se abarata el suelo, y hay mucha diferencia con este precio y el de mercado». Los pisos van destinados a los pescadores que no cuentan en la actualidad con vivienda propia, lo que supondrá un gran ahorro a final de mes a cada familia. Ferrer también señala que «la idea es construir una nueva sede social, para la Confraria».
De los cincuenta asociados a la Confraria serían quince las personas interesadas al adquirir una vivienda. Por tanto se trata de una iniciativa de carácter social que va en beneficio de los propios socios de la Confraria de Pescadors.
Además de estas construcciones lo que se hará también será una nueva sede para la Confraria de Pescadors, puesto que su local ha quedado ya obsoleto y de esta manera contará con nuevas instalaciones y también se ha previsto la construcción de diferentes espacios para almacén que también serán para los pescadores de Cala Rajada. Esta es la solución que han encontrado los pescadores de la confraria con la edificación en este solar para dar salida a las diferentes demandas. Necesidades tanto a nivel social de los propios pescadores, como a nivel interno que cubrirán unas instalaciones más adaptadas a las necesidades del sector de hoy en día.
Sin duda serán unas construcciones muy bien acogidas por los pescadores y sus familias que tienen así una gran ayuda, en esta ocasión de su misma asociación, lo que significa un gran ejemplo de ayuda a las necesidades sociales por parte de un colectivo muy arraigado en la sociedad de Cala Rajada y de Capdepera.
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