La Policía Local tuvo que poner orden ante la avalancha de personas en las depedencias municipales.

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A.BASSA/J.SOCIES. Se habían creado muchas expectativas y todos querían cobrar «3.000 euros». La situación se desbordó totalmente y ayer se formaron largas colas y hubo empujones para acceder a las ayudas de urgencia que el Govern ha concedido a los ayuntamientos y que se tramitan a través de los servicios sociales. En Manacor hubo un caos total y la Policía Local tuvo que intervenir para poner un poco de orden. Había mucha desinformación y centenares de personas acudían a «cobrar», ya que «así nos lo han dicho en el colegio de los niños».

El Ajuntament de Manacor firmó hace dos semanas un convenio con la Conselleria d'Afers Socials del Govern a través del cual se concede a Manacor una ayuda de 50.296 euros para dar respuesta a situaciones de necesidad derivadas de la coyuntura económica que afectan a personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad o exclusión social.

El Govern otorga estas ayudas a los ayuntamientos y son éstos los encargados de evaluar las necesidades de los vecinos. Los destinatarios no son los usuarios habituales de los servicios sociales, sino que el perfil es diferente y son muchos los que se pueden acoger. La finalidad es dar salida a necesidades concretas, urgentes y básicas de subsistencia como alimentación, alojamiento y otros tipo de gasto de la unidad familiar como pueden ser luz, agua, pañales o leche. La cantidad máxima que se puede percibir por unidad familiar son 2.900 euros a lo largo de 12 meses.

La regidora de Servicios Sociales del Ajuntament de Manacor, Catalina Riera, reconoció que la situación estaba desbordada. «Sabíamos -explicó- que se habían generado muchas expectativas porque los demandantes estaban pendientes de cuándo saldrían estas ayudas, y la verdad es que ha habido un poco de presión».

Riera quiso agradecer al personal de servicios sociales «el esfuerzo realizado para atender a esta situación», avanzó que se recogerán todas las peticiones, se analizarán las situaciones de cada familia y se priorizará, ya que las ayudas concedidas no serán suficientes para atender a toda la demanda existente.