Los encargados de la ofrenda y el autor del mural que está en Calvià son descendientes de asesinados.

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JOAN SITGES
Ayer eran muchos los que en el cementerio de Son Coletes recordaron a los centenares de ciudadanos que «convencidos de que la justicia y la libertad son derechos inseparables de la condición humana, fueron asesinados con los ojos vendados, arrodillados y cara a la pared».

Centenares de personas asistieron al ya tradicional homenaje y todos tienen claro que «volveremos hasta el día que podamos decir descansad tranquilos, vuestras rosas han florecido», según se leyó en el manifiesto.

El mural, más cerca
Una de las reivindicaciones del Comité de Son Coletes es la instalación del mural diseñado por Jaume Ramis y elaborado por Andreu Pasqual Frau, en el actual cementerio. La reclamación podría fructificar pronto ya que el alcalde de Manacor, Antoni Pastor, según ha podido saber Ultima Hora, se ha puesto en contacto con los representantes del Comitè de Son Coletes para organizar una reunión. Una reunión dónde se planteará el traslado del mural desde Calvià, dónde está instalado, a Manacor. Además el contacto con el alcalde podría ser el primer paso para convertir el homenaje en un acto institucional para que por primera vez en la historia el Ajuntament de Manacor «honore y recuerde los que durante setenta años no han disfrutado más que del reconocimiento silencioso de sus familiares», según las palabras de Maria Coloma Gelabert, que leyó el manifiesto de este año.

Un escrito emotivo y contundente que, tomando como hilo conductor un asesinato concreto, repasó la historia y señaló con el dedo la corrupción política y de la justicia a las que hizo referencia como «la clara muestra de una democracia malsana». Aunque la emoción llegó con la ofrenda floral a la fosa común del cementerio de Manacor. Este año los encargados de depositar la corona de laurel a «los muertos por la libertad» fueron Pedro Estelrich y Magdalena Nebot, familiares directos de hombres asesinados el cementerio en el cual descansan. Algunos alcaldes de la comarca hicieron asistieron a título personal al acto. Hay que tener en cuenta que muchos de los asesinatos en Son Coletes eran vecinos de otros pueblos que fueron trasladados a Manacor. Antoni Pastor, el alcalde de la ciudad, asistió por segunda vez acto y le acompañaron el de Son Servera, Josep Barrientos, el de Vilafranca, Jaume Sansó y el de Petra, Joan Font. Además el conseller insular d'Interior, Joan Lladó, y el conseller de Mobilitat, Gabriel Vicens, también estuvieron al lado de los familiares de las víctimas. Juntos dejaron claro que todos los que ayer estaban en Son Coletes estaban allí «para recordar nuestros muertos, pedir un reconocimiento y reivindicar sus ideas y sus valores. Aquello por lo que murieron».