El aparcamiento de la madre de Isabel Alemany en Sant Elm fue cerrado por Hidalgo en julio de 2006.

TW
0

El Ministerio Fiscal ha solicitado una pena de 2 años de cárcel para el ex alcalde de Andratx Eugenio Hidalgo por el delito continuado de coacciones al ordenar el cierre del aparcamiento público, propiedad de la madre de la regidora de UM Isabel Alemany en Sant Telm, al parecer, como «venganza» por las «profundas» diferencias que mantenía con su entonces adversaria política, según el escrito de acusación del fiscal.

Asimismo, la Fiscalía pide 9 años de inhabilitación especial para Hidalgo por el delito continuado de prevaricación. Ambas peticiones coinciden, prácticamente, con las presentas por la acusación particular -ejercida por Isabel Alemany-, que solicita 3 años de cárcel para el ex alcalde por el delito continuado de coacciones y 9 años de inhabilitación especial.

Hidalgo ya ha sido condenado a 4 años de prisión en el primer juicio del 'caso Andratx' -la supuesta trama de corrupción urbanística en ese municipio- celebrado en la Audiencia de Palma por la casa que se construyó sin licencia. No ha ingresado en la cárcel debido a que su abogado, Rafael Perera, recurrió el fallo en casación ante el Tribunal Supremo.

La vista por el cierre del párking de Sant Telm se celebrará en un juzgado de lo Penal, después de que la juez instructora de esa causa, Piedad Marín, de Instrucción 4, hubiese decretado la apertura de juicio oral.

En su resolución, la juez decreta la libertad provisional de Hidalgo, con la obligación de comparecer ante ese juzgado cuando sea llamado, y le requiere para que en 24 horas aporte una fianza de 600 euros.

El fiscal señala en su escrito que Hidalgo, entonces alcalde de Andratx, actuó «en represalia» contra Isabel Alemany (defendida por el abogado Miquel Borràs), hacia la cual sentía «una gran animadversión», ya que había promovido acciones judiciales contra él, al ordenar el cierre del aparcamiento.

El representante del Ministerio Público añade que Hidalgo quiso hacer coincidir el cierre con la época estival «para así provocar mayores perjuicios económicos a la madre de la señora Alemany, que sabía que venía explotándolo desde hacía años». Señala que intentó darle una apariencia de legalidad al cierre y encomendó a la Policía Local la confección de un informe sobre el párking, en el que constaba problemas de atascos circulatorios en el referido aparcamiento.