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Un año más con la llegada del verano los vecinos o veraneantes de Cala Rajada reclaman la unión del paseo de Son Moll y el paseo de las Atzavares, dos senderos de la costa que van a parar a los dos extremos de la playa de Son Moll.

Los vecinos señalan que deberían buscarse soluciones para unir los dos paseos que se cortan de forma abrupta por la playa, entre las posibles actuaciones se comenta la posibilidad de colocar una pasarela de madera para poder cruzar la playa sin pisar las rocas y la arena. Según algunos residentes esto daría mucha más vida a los dos paseos ya que les daría continuidad acentuando su encanto y «permitiendo hacer caminatas más largas y cómodas», evitando así las molestias que supone completar el recorrido cuando por ejemplo se va con cochecitos de bebé.

Los dos paseos son muy concurridos tanto por los turistas como por los gabellins. Y entre estos usuarios hay algunos que apuestan por buscar una solución intermedia aunque sea uniendo los paseos por un camino secundario que rodeara la playa.

Atzavares
El paseo de las Atzavares fue inaugurado el mes de junio del 2008, y comunica las playas de Son Moll y n'Aguait, dos playas bastantes conocidas al estar muy próximas al núcleo urbano de Cala Rajada. Este camino que transcurre por la costa tuvo un coste de un millón de euros que sirvió para hacer las pluviales y dotar de alumbrado toda la zona así como la siembra de árboles y plantas autóctonas.

En general después de un año de su inauguración, los usuarios del paseo muestran su alegría por la renovación y adecuación de este sendero litoral integrado en el paisaje y que se ha convertido con el tiempo en un autentico paseo marítimo.