El PSOE vota en el Consell la legalización de la calle de Inca invadida por el muro del mercado cubierto

Los miembros del Bloc en la Comissió, Antoni Alorda i Joana Lluïsa Mascaró, plantearon que la alineación de la calle Born figurara como una deficiencia y se obligase al Ajuntament a corregirla. La presidenta de la Comissió, Maria Lluïsa Dubon, pidió a los miembros del Bloc que la retiraran, pero estos forzaron la votación. Los representantes del PSOE, del PP y de UM se opusieron y la prescripción no se introdujo.

Xavier Ramis, portavoz de los socialistas en Inca, justificó el sentido del voto de sus compañeros de partido: «la alineación de las calles es una competencia municipal y la de la calle Born es correcta desde el punto de vista técnico, aunque no estemos de acuerdo», puntualizó.

Ciertamente, ninguna de las prescripciones anotadas por los técnicos se refería a la alineación de la calle Born. Sin embargo, y a pesar del voto contrario a la propuesta del Bloc, Ramis insistió en que «el tema del mercado cubierto nos preocupa mucho. Con el corazón apoyamos la propuesta, y de hecho estamos a favor de derribar el muro, pero debemos reconocer que se trata de una competencia municipal».

Antoni Alorda argumentó a favor de su propuesta que «no es de recibo que el único motivo para cambiar la alineación histórica de la calle Born, en pleno centro histórico de Inca, se justifique en la legalización del muro del mercado». En este sentido, recordó que la presidencia del Consell de Mallorca, a instancias de la Comissió d'Urbanisme, mantiene un contencioso administrativo contra este muro. Alorda cree que «las formaciones políticas que nos hemos opuesto a la invasión de la calle por el mercado deberíamos mantener una actitud más firme».

Fuentes del Consistorio mostraron su satisfacción por el hecho de que la Comissió d'Urbanisme «respete» la alineación de la calle Born. «A partir de ahora ya no se podrá hacer ninguna prescripción contra el mercado, por lo que entendemos que está bien y que será legal».

Más allá del polémico muro, la Comissió d'Urbanisme suspendió el conjunto del Pla General de Inca y lo devolvió al Ajuntament para que subsanase las 83 deficiencias detectadas por los técnicos.

De estas «alrededor de 70 están relacionadas con aspectos menores», aseguró el Ajuntament, motivo por el cual sus servicios jurídicos auguran que «en noviembre ya se habrán subsanado, de manera que en diciembre o enero, probablemente, la Comissió d'Urbanisme ya podrá aprobarlo». La adaptación del PGOU al Pla Territorial se puso en marcha en 2005.