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Dos días después de que abriera al público, el Ajuntament d'Inca inauguró ayer oficialmente el nuevo mercado cubierto. La oposición no asistió y escenificó así su desacuerdo con la manera como el Consistorio ha gestionado la construcción del edificio.
La inauguración institucional del recinto constó de dos actos: el descubrimiento de la placa, por una parte, y los discursos, que corrieron a cargo de una representante de los comerciantes y del alcalde. Para celebrar la apertura, el Ajuntament programó actividades infantiles y ofreció un refrigerio a los centenares de ciudadanos que asistieron al acto. Andrea Guardiola, que regenta el horno del mercado, pronunció un discurso en el cual invitó a los inquers a disfrutarlo. «Queremos que sea vuestra casa, venid y disfrutadlo», dijo. Rotger, por su parte, a pidió de nuevo disculpas a los ciudadanos por el retraso y asumió la responsabilidad en los errores cometidos. El público respondió con aplausos a estas palabras de Rotger.
Xavier Ramis y Antoni Rodríguez, portavoces del PSOE y el Bloc, respectivamente, justificaron su ausencia en el hecho que «no podemos ir a la inauguración de un edificio que está fuera de ordenación». Sin embargo, los dos reiteraron su apoyo a los comerciantes.