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Hoy será el descubrimiento de la placa que dará nombre a la nueva plaza de Baltasar Tortella, el próximo viernes será el turno del casal de jóvenes de So na Monda, el miércoles 2 de junio tocará el museo del calzado y más adelante será la ampliación de la escoleta para criaturas de 0 a 3 años Toninaina.
Pere Rotger i Llabrés se despedirá el 17 de junio de la alcaldía de Inca, un cargo que ha ocupado durante los últimos quince años, con un verdadero sprint de inauguraciones. Le sustituirá Rafel Torres (PP), quien ha sido una de sus manos derechas en las últimas legislaturas.
Uno de los actos más significativos y que, sin lugar a dudas, más expectación ha creado, es el que se celebrará el próximo 10 de junio en el convento de Sant Domingo: la presentación de sus memorias, que llevan por título Ja no sonen les sirenes y que ha escrito el periodista y jefe de prensa del Ajuntament d'Inca Bartomeu Garcies.
Pese a las numerosas inauguraciones que Rotger ya ha protagonizado en los últimos meses -el mercado cubierto, las reformas de la avenida Reis Catòlics, la plaza del Bestiar o de la calle Jaume Armengol, por ejemplo-, el todavía alcalde de Inca dejará atadas pero sin estrenar las obras de remodelación del polideportivo Mateu Cañelles o de la plaza de Espanya, entre otras.