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"Como alcalde trato a todo el mundo por igual». Así respondía el alcalde de Son Servera, Antoni Servera, a las sospechas del PP, denunciadas ayer en este periódico, de privilegios dados por el equipo de gobierno a la empresa concesionaria del agua Aigües Son Sard.
El PP basaba sus acusaciones en una serie de hechos y destacaba la «vinculación de Servera con esta empresa». El alcalde comentaba que «he trabajado 22 años en Aigües Son Sard. Cuando accedí a la alcaldía tomé una excedencia y desde este momento no he participado en ninguna votación que haya tenido relación con la empresa. No estoy en la comisión de seguimiento y el presidente es ahora Pep Àlvarez. Me he desligado totalmente precisamente para evitar todo tipo de suspicacias».
Servera añadía que «lo que hago es confiar en los técnicos y que sean ellos los que evalúen los informes para ver si se cumplen las condiciones del contracto».
Por su parte el Partido Popular denunciaba que desde hacia mucho tiempo no habían tenido ningún tipo de noticias acerca de la empresa concesionaria pese a que habían solicitado en diversas ocasiones las actas.
El alcalde defendía que «yo en este tema estoy totalmente al margen. Por lo que me ha informado Àlvarez como presidente de la comisión, esta se ha reunido con los responsables de la empresa y ha entregado un informe con todo lo que ha hecho, la mejoras realizadas y por lo que tengo entendido ya se han cambiado algunos metros de tubería tal y como se exigía en el contracto».
Servera dejaba muy claro que «en estos momentos son los técnicos los que tienen en sus manos este informe y serán ellos los que decidirán si han cumplido o están cumpliendo la condiciones del contracto porque lo que está muy claro es que como en cualquier otro caso si hubiera in incumplimiento se tomarían las medidas oportunas», concluyó Antoni Servera.