Un numeroso grupo de antitaurinos se congregó ayer a las puertas de la plaza para manifestarse en contra de las corridas de toros. Cursarán denuncia contra el promotor como ya lo hicieron en 2010 por permitir el acceso de menores al recinto y también tienen previsto denunciar la superación del aforo. | J.LL. / E.B.

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No se recordaba en Alcúdia la plaza de toros tan llena como en la corrida de ayer tarde. Era la primera vez que toreaban juntos el diestro 'Jesulín de Ubrique' y su hermano Víctor Janeiro y, posiblemente, la reciente condena de la mujer de 'Jesulín', Maria José Campanario, contribuyó a despertar el morbo de las más de 3.000 personas que accedieron al recinto. Angel Teruel completaba el cartel.

La superación del aforo de 3.200 personas le puede costar una multa al promotor que vendió 2.500 entradas a un precio de entre 20, 30, 50 y 60 euros a las que se sumaron numerosos invitados difíciles de cuantificar. Podía verse a numeroso público trepar por las paredes de la plaza en busca de un hueco. El promotor ofreció a la tercera edad de Alcúdia las entradas a un precio especial de 20 euros por lo que se disparó la afluencia de mayores, la mayoría mujeres que satisfacían así la curiosidad de ver al torero que más páginas del corazón ocupa. El programa televisivo Sálvamé, también estaba acreditado en el evento.

La peculiaridad del público asistente (poco ducho en el arte Cúchares) contribuyó a flexibilizar el reparto de trofeos. Así, 'Jesulín de Ubrique' recibió dos orejas en el primer novillo y dos orejas y rabo en el segundo. Su hermano Víctor cortó una oreja en el primero a pesar de que dio un pinchazo y mató con una media estocada por lo que los más taurinos criticaron la benevolencia del presidente, Mateo Salord, al que describieron como un presidente «generoso, pero con clase». En su segundo toro Victor Janeiro estuvo algo más acertado y cortó dos orejas.

Orejas y rabo

Por su parte Àngel Teruel atravesó su primer toro con la espada ante la perplejidad de parte del público y se llevó una oreja de su segundo toro al que mató tras dos intentos fallidos.

En resumen, 'Jesulín de Ubrique' fue el gran triunfador de la tarde, jaleado por el público asistente que como en los viejos tiempos, en medio de una gran juerga regada con alcohol, un 'botellón con toros' lanzaba al tendido sujetadores de grandes dimensiones comprados en el mercadillo.

En la plaza se oían gritos como «¿Quién fuera la Campanario?», procedentes, hay que decirlo, tanto del público femenino como del masculino, muy dado al cachondeo.

'Jesulín de Ubrique' mantuvo la compostura y estuvo muy profesional. Su hermano Víctor Janeiro correcto. Mientras que Àngel Teruel falló con la espada.

Afición

El cartel de Alcúdia ha sido sin duda el más exitoso del verano. A mediodía las entradas (2.500 salían a la venta) ya estaban agotadas y a medida que pasaban las horas se iban desplazando hasta Alcúdia aficionados y turistas que llegaban en autocar procedentes de diferentes destinos. Mucha gente se quedó a las puertas al no poder conseguir un pase. Nada que ver con la corrida del sábado en Muro donde se vendieron cerca de 500 localidades.

La plaza de toros de Alcúdia programa habitualmente una única corrida anual siempre coincidiendo con la celebración de las fiestas de Sant Jaume.