El pleno del Ajuntament de Sant Joan, localidad que también se vería afectada, aprobó en el pleno del miércoles por unanimidad una moción de urgencia para dejar constancia del rechazo hacia la planta.
«Estamos en contra de este proyecto porque se prevé en una zona de suelo rústico. Hay espacio suficiente en polígonos industriales», explicó el alcalde, Joan Magro.
De hecho, el primer edil aseveró que a pesar de la ubicación en Sineu «también afectará a Petra y a Sant Joan ya que los olores llegarán».
En Sineu, ya se han movilizado en contra de la iniciativa con una recogida de firmas entre los vecinos para mostrar su desacuerdo con la propuesta de la planta.
El Consell de Mallorca ha informado desfavorablemente del proyecto. Los técnicos manifestaron que «la ubicación en suelo rústico común» con «actividad industrial de nueva planta, resulta prohibida por la norma 17 del Plan Territorial de Mallorca».
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