Imagen de una edición del Correbou de hace unos años, cuando las medidas de seguridad eran menores. | M. À. Cañellas

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La nueva ley de ‘toros a la balear' permitirá el Correbou de Fornalutx pero el formato deberá reinventarse de nuevo y la fiesta ya no tendrá nada que ver con la celebración tradicional. Así lo ha asegurado el alcalde de Fornalutx, Antoni Aguiló (PP), que estos días negocia cómo y dónde debe celebrarse este nuevo Correbou. «Lo que ya está claro es que así como se ha venido celebrando hasta ahora ya no será posible», admite Aguiló que incluso apunta que «es probable que se tenga que celebrar fuera del casco urbano».

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Según las conversaciones previas que el alcalde ha mantenido estos días con representantes de los partidos del Pacte y también de organizaciones animalistas, la festa del bou sólo se podrá llevar a cabo al amparo de la nueva legislación si se desarrolla «en un recinto completamente cerrado, con el animal sin ir sujeto con cuerdas y, además, la entrada a menores de 18 años estará prohibida».

Según Aguiló, bajo estas estrictas condiciones «es totalmente imposible celebrar el Correbou como hasta ahora por las calles del pueblo, ya que esto exigiría un plan de seguridad muy costoso, el vallado de todo el recorrido y la limitación del aforo tanto en lo que se refiere al número de los asistentes como a su edad. Todo ello sería inasumible por completo por el Ajuntament», señala.