Guillem Garí lleva décadas al frente de Es Cruce, uno de los restaurantes más típicos y famosos de la Isla. El principal problema del que se queja es de los cambios continuos en las normativas, que no permiten estabilidad al negocio y obligan a modificaciones continuas. «Echamos de menos un criterio único y duradero» admite. En un domingo como el de ayer su establecimiento atiende a cientos de personas, aunque su capacidad ha quedado reducida de 650 a 300 cubiertos. «El cliente se ha adaptado, viene antes o después de las horas más concurridas. Ahora nuestras franjas más intensas son de 12 a 17 y de 19 a 24 horas», cuenta Garí, que a día de hoy no tiene a ningún trabajador en ERTE. Su restaurante ha visto además como la comida para llevar aumentaba espectacularmente, mientras que la celebración de comidas de empresa, bodas o comuniones ha descendido prácticamente a cero.
Una visión similar es la que ofrece Tomeu Torrens, del celler Can Amer de Lloseta. El nivel de trabajo en su negocio es bueno y su plantilla se mantiene activa al 100 %. El verano ha sido aceptable por el desplazamientos de bodas, bautizos y comuniones que se no se celebraron durante el confinamiento. La comida para llevar también ha sido un gran filón para Can Amer, pero los próximos meses se presentan inseguros: «probablemente vamos a perder la mejor época para nosotros con las Firas de Inca y el Dijous Bo, pero espero que el nuevo estado de alarma sirva para que la situación esté más controlada en Navidad». No obstante Torrens ha detectado en las últimas jornadas un desplome de la actividad en las noches, que achaca a la incertidumbre de los clientes ante los cambios constantes en las restricciones.
Más pesimista es Toni Florit, al frente de Moments y Sa Plaça, en Sineu, y Es Pou, en Lloret. Se teme un invierno duro, ya que Sineu depende mucho del mercado semanal. Actualmente tiene a 5 de sus 23 trabajadores en ERTE y ve en la falta de ayudas un problema. «Los gastos de luz, agua, etc, siguen al 100%» se lamenta. «En Sineu existen 36 restaurantes, si se llegara a establecer un confinamiento perimetral muchos de ellos tendrían que cerrar», reconoce. «Las autoridades deberían planificar bien las medidas de restricción y las ayudas, aunque estas no son una solución. Más bien son pan para hoy y hambre para mañana», añade, mientras agradece a los clientes la comprensión y colaboración.
9 comentarios
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...salva a los restaurantes que se portaron bien con el cliente local cuando había vacas gordas. Los otros han aprendido algo sobre el karma este año.
Lo de "salvar los restaurantes" me parece excesivo. Si acaso "dar un respiro".
De siempre se ha sabido que es el español,obrero,luchador,trabajador y honrado el que mantiene este país!!! Pero a este gobierno le va bien mantener inmigrantes ilegales,delincuentes en las calles,okupas y demás chusma que también pagamos los de siempre..... en momentos como ahora se ve más claro!!!
Los españoles somos de todo Europa (y más de los paises del Sur) los que tenemos un horario de comidas y cenas fuera de lo normal. Después salen fuera del pais y no encuentran quien les da de comer a las 16 o las 23 h. El horario de los trabajadores de restaurantes NORMAL es de 11 a 15 y de 19 a 23H. En muchos paises de Europa es de 11 a 15 y de 17.30 a 21.30! Y si entras a las 14.30 o las 21.00 ya te advierten que la cocina cierra en media hora. En España el horario no es horario porque nadie piensa en que ahora los empleados tienen que fichar. En consumidor español es egoísta! Y lo que a mi me sorprende más es que haya gente que van a cenar con NIÑOS a las 22.30 cuando un crio tendría que estar ya mucho rato en la cama.... Ya se que mi comentario no va a gustar a muchos pero que estos muchos profundizan un poco en "sus costumbres".
El fallo ha sido quitar mesas, lo que hacia falta ya que estamos en suelo rustico y no vale nada, era construir una nave adyacente con una cuarterada asfaltada de aparcamientos, sin permiso ni licencia ni proyecto, no hace falta. Turismo, Empleo, Sanidad, Urbanismo y Hacienda no tienen competencias en la zona Franca del Cruce, que por algo se llama Villa-Franca
Si pero yo era su cliente aunque cada vez empeora la calidad de comida, no volveré.
Con cenar antes solucionado, además es mejor cenar a las 8 que a las 10..apoyar la hostelería local no es tan difícil
Yo no me gasto ni un euro en un restaurante no se sabe cuando va terminar esta cosa y gastar rl dinero con estos gastos innecesarios pues nada que luego los bufas ya se apañarsn mejor gastarlo en necesidades reales
...si salvados, pero hasta q los vuelve a hundir el toque de queda, porque ya se sabe, si ceno a las 22 es seguro, pero si ceno a las 23 correo peligro... la verdad, me parece más peligrosa la represión q el riesgo q corremos por cenar tarde