Los vecinos presionan a las administraciones para proteger la bahía de Pollença de la contaminación.

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Las últimas analíticas realizadas por el Centro Balear de Biología Aplicada (CBBA) sobre muestras de agua recogidas en seis puntos de la bahía a petición de la Associació per a la Defensa del Port de Pollença (ASDEPP) revelan restos de fecales en dos de los habituales puntos negros. Se trata de las muestras recogidas delante de la piscina del Daina y en la desembocadura del torrente de Sant Jordi, a donde va a parar el agua sobrante de la depuradora.

Las muestras analizadas se recogieron el 18 de agosto, cinco días después de que la Conselleria de Medi Ambient anunciara la creación de una mesa de trabajo para analizar las presiones de sustancias contaminantes en la bahía de Pollença y tratar de determinar su origen.

La primera mesa de trabajo, que contará con representantes del Govern, Costas, del Ajuntament, centros de investigación, asociaciones empresariales, vecinales, conservacionistas y pescadores está convocada para el 7 de septiembre.

El gerente de Abaqua, Guillem Rosselló, niega que la depuradora sea el origen del vertido detectado en la desembocadura del torrente. «No procede de la depuradora porque el punto de vertido está demasiado alejado de la desembocadura. Hay múltiples posibles razones, entre otras conexiones ilegales o una alta presencia de excrementos de animales», dice Rosselló. «Es un tema complejo y de ahí el interés de convocar la mesa de trabajo para dar una solución efectiva que aborde el problema en su conjunto», añade.

Los vecinos hacen un llamamiento a las diferentes instituciones para que pongan fin a esta problemática. «Todas las administraciones tienen que dejar de culparse unas a otras, ponerse las pilas y solucionar los vertidos ante las evidencias de contaminación», dijo ayer la vicepresidenta de ASDEPP, Dulce Monjo.

La asociación nació hace aproximadamente un año por iniciativa de un grupo de vecinos y veraneantes delMoll, cansados de la falta de soluciones efectivas. Durante varios meses el Ajuntament cuestionó una tras otra sus analíticas (al no tener una cadena de custodia oficial) pero lejos de rendirse la ASDEPP lanzó una campaña de crowdfunding para sufragar un estudio del estado del medio marino avalado por el CBBA.

Desde mayo a septiembre realiza un seguimiento continuo de parámetros físico-químicos y biológicos para la determinación de la calidad de muestras de agua, sedimentos y arena en diferentes puntos de muestreo de la Bahía de Pollença. Los resultados son públicos y se pueden consultar en la web de la asociación.

La presión vecinal llevó al Ajuntament a acordar en pleno la    aprobación de un plan de actuaciones en las redes municipales de evacuación de aguas pluviales en el Moll, pero critican que a día de hoy solo se ha realizado una parte de las actuaciones previstas. Denuncian la obstrucción de varias salidas naturales de agua al mar, la falta de renovación del alcantarillado de urbanizaciones como Can Xingala y la instalación de sistemas de alerta.