Sóller ha recibido este verano más visitantes diarios que nunca y ha habido graves problemas de movilidad. | R.P.F.

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El Ajuntament de Sóller se está planteando dejar de hacer promoción exterior del destino turístico durante un año, dejando de publicar durante este tiempo anuncios en revistas especializadas de viajes o no asistiendo a Fitur. El concejal de Turismo, Sebastià Aguiló, ha asegurado que «no hay nada decidido ni se tomará ninguna medida sin antes hablar con el sector, pero nos hemos empezado a plantear la posibilidad de esta moratoria porque vista la gran cantidad de visitantes que han venido este verano parece ser que el destino ya es muy conocido». Aguiló descarta totalmente reducir por parte del Ajuntament la atención al turista o dejar de realizar actividades de promoción interior, sino solamente «pausar la publicidad exterior y destinar el gasto que esto pueda suponer a otras necesidades del área de turismo o a incentivar el consumo local negocio local».

Agobio

El concejal admite que, en Sóller, «ya nadie niega que este verano todos nos hemos sentido un poco agobiados» y cree que de seguir esta dinámica «incluso podría llegar a ser perjudicial para los negocios locales y para el propio sector turístico. Hay que empezar a pensar como evitar el riesgo de morir de éxito».

Hay que destacar que Sóller ha registrado este verano una afluencia de visitantes que ha batido todos los récords y que ha tenido consecuencias negativas sobre la movilidad y sobre el bienestar de vecinos y de los propios turistas que persiguen un destino tranquilo y no demasiado saturado.

El apunte

Un ‘guiño’ a los ciudadanos que se quejan de la masificación

El concejal tiene claro que se trata de un tema «muy delicado» y reconoce que no sabe hasta qué punto la promoción exterior municipal puede haber influido en el alud de visitantes. De alguna manera parece un intento municipal de hacerse eco de las quejas ciudadanas por la masificación, que afecta toda la Isla. Aunque el sector hotelero no se ha pronunciado todavía, parece evidente que la saturación se produce más bien por la gran afluencia diaria de coches.