Un equipo formado por una decena de personas está trabajando minuciosamente en la primera zona del cementerio de Son Carrió donde se intuye que puede haber víctimas de la Guerra Civil. Jaume Porsell atiende a las explicaciones del coordinador, Cesc Busquets. | Gori Vicens

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El director general de Coordinació i Transparència del Govern balear, Jaume Porsell, garantizó este martes la continuidad de los trabajos de exhumación en la playa de sa Coma, aunque no detalló los plazos con los que se ejecutarán. De momento se ha empezado con los estudios previos. En la futura actuación «la intención es entrar por la otra parte de la duna, para no afectarla. Si una vez tengamos los estudios podemos intervenir lo haremos, sino, tendremos que esperar a que finalice la temporada turística». Así lo aseguró Porsell en el trascurso de una visita realizada en las excavaciones que se llevan a cabo en el cementerio de Son Carrió.

Y es que la zona de sa Coma es más compleja que esta última actuación actuación donde se llevan a cabo los trabajos de excavación en la zona de la fosa común del cementerio antiguo de Son Carrió.

Respecto a sa Coma, Jaume Porsell, explicó que «teníamos la autorización de Medi Ambient para actuar sin que las dunas se vieran afectadas, se actuó y no se encontró nada». Por eso, «ahora estudiamos entrar por el otro lado sin tocar las dunas, para ver si encontramos restos. Si los hubiera, se verá de qué forma se interviene para después volver a restaurar la zona».

Una vez se cuente con el estudio detallado, «veremos en qué período actuamos, para no interrumpir la temporada turística. Si no puede ser antes del verano, será después», explicó Jaume Porsell, acompañado del alcalde de Sant Llorenç, Jaume Soler (PP), en el transcurso de la visita.

Fases

La intervención de campo en el interior del cementerio carrioner está dividida en diversas fases consecutivas. El lunes se empezó a limpiar y excavar en el primer sector. Han aparecido restos pero se descartan que sean de la Guerra Civil. Los sitúan anteriores o posteriores, al tratarse de la antigua fosa común. Cesc Busquets, coordinador del IV Pla de Fosses, destacó que «la existencia de una zanja dentro de este espacio podría indicar que hubiera sido utilizada para enterrar los cuerpos de las personas fallecidas durante el desembarco de Bayo, entre el 16 de agosto y el 4 de septiembre de 1936. La zona del Llevant es donde se produjeron más bajas y sus compañeros tuvieron que buscar lugares donde enterrar a las víctimas», explicó. Paralelamente a Son Carrió, el Govern también actúa en la segunda fase de excavaciones en el cementerio de Sant Francesc, en Formentera.