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Más de dos mil personas asistieron ayer en la madrileña catedral de la Almudena al funeral público en memoria de María de las Mercedes, madre del Rey, fallecida el pasado día 2.

La misa, oficiada por el cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco, fue presidida por el Rey y toda la familia real, junto a los cuales también estuvieron presentes el presidente de la Comunidad Autónoma, Alberto Ruiz Gallardón y el alcalde de Madrid, José María Alvarez del Manzano. Las campanas repicaron durante todo el oficio religioso, que precede al que se celebrará por el alma de la madre del Monarca el próximo jueves en el monasterio de San Lorenzo de El Escorial.

La ofrenda litúrgica fue efectuada por la que fuera amiga y dama de compañía de Doña María de las Mercedes, la condesa Zamoyska, y por el secretario de su Casa, el coronel Luis Fernández de Mesa. Al concluir el funeral, los Reyes y la Familia Real recorrieron la nave central de este templo mezcla de gótico y neoclásico, cuya construcción se inició en 1883, y en su camino hacia la salida se detuvieron en repetidas ocasiones para recibir el pésame y el afecto de numerosos fieles. El jueves se celebrará otra ceremonia en El Escorial a la que acudirán miembros de otras casas reales, entre ellos el príncipe Carlos de inglaterra.