Goran Persson, primer ministro sueco, destacó los logros del Foro.

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EFE - ESTOCOLMO El Foro Internacional de Estocolmo sobre el Holocausto, que concluyó ayer luego de tres días de intensas sesiones, alcanzó el compromiso de las 47 naciones asistentes de rememorar el Holocausto y honrar a sus víctimas, y a la vez combatir a las fuerzas genocidas en el mundo.

Al foro asistieron un total de 1.300 delegados de 47 países, entre ellos 20 jefes de Estado y de gobierno, así como académicos, supervivientes del Holocausto y representantes de organizaciones no gubernamentales y comunidades judías del mundo entero.

«Hemos tardado 55 años en aunar esfuerzos para comprometernos a promover la educación, el recuerdo y la investigación sobre el Holocausto», dijo el primer ministro sueco, Goeran Persson, en el discurso de clausura de la conferencia.

Persson señaló que «en tres días hemos hecho historia y tal vez futuro», al referirse a los logros de esta conferencia que tuvo por objetivo discutir formas y enfoques para esclarecer el fenómeno del Holocausto y combatir sus expresiones contemporáneas. Stuart Eizenstat, subsecretario de Estado de la Tesorería de Estados Unidos, presentó un informe sobre el trabajo del Grupo de Acción que también integran Alemania, Francia, Holanda, Israel, Italia, Polonia, el Reino Unido y Suecia.

«Los supervivientes y educadores que han hablado presentaron el desafío de hacer del Holocausto, con todo su horror y complejidades, parte del bagaje personal de conocimientos de los estudiantes y de todos nuestros ciudadanos, no sólo en nuestra época sino para todas las épocas», subrayó Eizenstat.

El subsecretario estadounidense, quien participa en el Grupo de Acción en representación del presidente Bill Clinton, dijo que «hemos intentado alcanzar una cierta medida de justicia para las víctimas supervivientes, mediante la recuperación de sus propiedades expoliadas». Esto se ha hecho «apoyando sus derechos en contratos de seguros, y compensándolos por la situación de esclavitud y trabajos forzados y otras injusticias que les infligió el régimen nazi», señaló Eizenstat.