Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de
Bolonia (norte de Italia) revela que la nicotina y el alquitrán no
son los únicos peligros de los cigarrillos, sino que éstos además
esconden efectos radiactivos. El informe, que será presentado
íntegramente mañana, con motivo de la Jornada Mundial contra el
tabaco, ha sido adelantado hoy parcialmente por la Organización de
Defensa del Consumidor italiano (Codacons).
Según los datos de Codacons, fumar 20 cigarrillos diarios
equivale a someterse a 300 radiografías anuales de tórax a causa
del polonio 210, una sustancia contenida en el tabaco que es
responsable de graves daños a los pulmones. Las radiaciones del
polonio 210, un alfa emisor y radionuclear con un elevado poder
para disociar las moléculas en iones, son particularmente dañinas
cuando entran en contacto con los tejidos vivos.
La Codacons solicitará al ministro italiano de Sanidad, el
oncólogo Umberto Veronesi, que ha emprendido una cruzada para
endurecer la legislación italiana anti-tabaco, una investigación
pública sobre el estudio, para comprobar los datos.
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