Tani, que obtuvo un indulto parcial tras ser condenada a más de 14
años por matar a su marido en 1995, que la maltrató durante años,
salió ayer por la mañana de la prisión de Alcalá-Meco tras lograr
el tercer grado penitenciario. En una conferencia de prensa que
ofreció en dependencias municipales en Rivas-Vaciamadrid, localidad
en la que reside junto a cuatro de sus hijos, Tani dijo que ahora,
sobre todo, «quiero estar con mis hijos, tranquila y luego hacer mi
vida normal. Seguir en Rivas y volver a mi trabajo sería mi
alegría». De momento, Tani tendrá que pasar las noches, de lunes a
viernes en un centro de régimen abierto penitenciario, pero durante
el fin de semana podrá pernoctar en su casa.
El alcalde de Rivas, Fausto Fernández (IU), que ha canalizado la
mayoría de las iniciativas en favor de la excarcelación de Tani,
agregó que «mientras exista el tercer grado, la Policía Municipal
de Rivas la acompañará allí por la tarde y la recogerán por la
mañana para que no corra ningún riesgo en ese trayecto. La
seguridad aquí la damos cada uno de los vecinos, que somos su
garantía».
Teresa dijo que se enteró del indulto por la televisión y que
luego se lo confirmaron una funcionaria de Alcalá-Meco y la
presidenta de la asociación Clara Campoamor, Lucía García, aunque
añadió que sólo se lo creyó «cuando vi a mis hijos en la tele
brindando con champán, con mis amigas, el alcalde y las
concejalas». a vida en prisión, afirmó, ha sido «muy dura» y «muy
triste», pese a la «mucha ayuda de las compañeras» y de los
funcionarios de la prisión. «Estuve unos días en la enfermería,
donde había ATS muy buenas conmigo, médicos y doctoras que han
estado pendientes de mí en todo momento», subrayó agradecida.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.