Un nuevo naufragio de una embarcación con inmigrantes clandestinos
se produjo en la madrugada de ayer en aguas del Estrecho, lo que
provocó la muerte de uno de ellos y el rescate de otros cinco,
mientras siguen los encierros en varias ciudades en protesta por la
entrada en vigor mañana de la ley de Extranjería.
Los cinco inmigrantes indocumentados fueron rescatados junto al
cadáver de otro compañero por Salvamento Marítimo y la Guardia
Civil que busca a otras cinco personas que viajaban en la
embarcación, que se hundió sobre las 02.00 horas de a tres millas
al sur de Punta Europa, entre Ceuta y Algeciras.
Los sobrevivientes, con síntomas de hipotermia, fueron
trasladados hasta el puerto de Algeciras, desde donde uno de ellos
fue evacuado al Hospital Punta Europa con contusión en el
tórax.
La Guardia Civil interceptó también ayer en Tarifa a 24
magrebíes indocumentados, con lo que ya son 53 los inmigrantes
detenidos en el Campo de Gibraltar después de que fueran
localizados 24 en un paraje costero y rescatados cinco más.
Para intentar que la ley de Extranjería no entre en vigor mañana
martes, evitar esas devoluciones a los países de origen y suavizar
la tramitación de documentación a los inmigrantes varios colectivos
iniciaron encierros y huelgas de hambre indefinidos en Barcelona,
Madrid, Valencia y varias localidades murcianas.
En Melilla, las familias de inmigrantes argelinos y rumanos que
con trece niños de corta edad seguían una huelga de hambre desde el
miércoles abandonaron anteaoche su actitud, al prometerles la
Administración española que serán trasladados a la península.
Estos inmigrantes se habían unido a la huelga de hambre que
siguen aún unos 180 acogidos en protesta por las órdenes de
expulsión decretadas contra 86 paquistaníes y 60 argelinos.
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