El Censo de Población y Vivienda 2001 movilizará a unos 43.000
empleados y permitirá censar a alrededor de 40 millones y medio de
personas y 17 millones de viviendas, según explicó ayer la
directora general del INE, Carmen Alcaide, durante la presentación
de la campaña para concienciar a los ciudadanos de su necesaria
participación. El trabajo de campo de la campaña, que tiene como
lema 'Cada persona cuenta', comenzará el 22 de octubre.
Entre las novedades destaca que por primera vez se podrá hacer
una explotación de los datos sobre parejas de hecho, homosexuales o
heterosexuales, dado que el cuestionario de hogares permitirá
establecer el sexo de las personas que componen el hogar y el
parentesco con la 'primera persona' o cabeza de familia. En
cualquier caso, Alcaide precisó que estos datos serán «de mínimos»
porque las personas que no lo deseen no tienen por qué
especificarlo.
Otro aspecto destacado es la importancia de los datos sobre
población extranjera en el momento actual, por lo que quisieron
transmitir seguridad y tranquilidad a los colectivos de
inmigrantes, especialmente a aquéllos que no tienen su situación
regularizada, dado que el INE se responsabiliza de que ninguna
institución tenga acceso personalizado a los datos.
Este organismo recuerda que cualquier ciudadano,
independientemente de su situación administrativa, puede
empadronarse. Así, señalaron que el censo facilitará el
empadronamiento a aquellos inmigrantes que todavía no lo estén.
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