TW
0

El príncipe Enrique, de 17 años e hijo menor de Carlos de Inglaterra, podría ser objeto de investigación policial tras admitir que ha fumado marihuana y se ha emborrachado varias veces, confirmó ayer la comisaria de policía Mandy Evely. Evely, de la policía de Wiltshire (sur de Inglaterra), donde se embriagó el joven príncipe, señaló que éste será tratado «exactamente igual» que cualquier otro joven por consumir alcohol sin tener la edad legal mínima de consumo, que es de 18 años en el Reino Unido.

Según la responsable policial, uno de los periódicos que hizo el domingo estas revelaciones «ha dicho que tiene una recopilación de pruebas contra él» que serán examinadas por la policía. «Estudiaremos las pruebas y si encontramos algunas que nos permitan actuar, por supuesto que emprenderemos acciones... Queremos impedir que la gente joven caiga en el alcohol y las drogas», explicó Evely.

El príncipe Enrique volvió ayer al selecto colegio de Eton tras pasar la noche en la residencia campestre de su padre en Highgrove, acompañado por su progenitor y su hermano Guillermo, de 19 años. Según la prensa británica, Enrique podría someterse a un examen de orina en Eton y ser expulsado si los resultados dan positivo de consumo de drogas. El último escándalo de la familia real británica saltó a la luz pública el domingo en las páginas de varios diarios sensacionalistas.