Taiwán se ha convertido, con 65 nuevos casos de neumonía atípica
anunciados ayer, en el único territorio del mundo donde la epidemia
del Síndrome Respiratorio Agudo y Grave (SRAG) aumenta en vez de
remitir. El parte sobre la evolución de la epidemia en las últimas
24 horas en Taiwán añade ocho muertos y 65 enfermos a la lista
oficial, que queda con un número acumulado de 60 fallecidos y 483
infectados desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) dio
la alerta mundial, el pasado 12 de marzo.
Los datos suponen un salto considerable a los del boletín
anterior (12 víctimas mortales y 35 afectados) y apoyan la decisión
de la OMS anunciada el miércoles, de extender a toda la isla la
recomendación de no viajar que había emitido antes sólo para
Taipei. No está incluido en estas cifras uno de los dos expertos
estadounidenses enviados a Taiwán por el Centro de Control de
Epidemias de Atlanta (EE UU), al que ayer se le detectó fiebre
alta.
La OMS solicitó a este centro norteamericano que ayudara a
Taiwán en su lucha contra la epidemia porque la isla no es miembro
de ese organismo. Esta misma semana, la OMS rechazó por séptima vez
consecutiva, de nuevo a instancias de China, la incorporación de
Taiwán como miembro observador. El ministro taiwanés de Sanidad,
Chen Shien-jen, explicó ayer, jueves, a la prensa que el objetivo
que se han fijado es contener la infección en los centros
sanitarios para mediados de junio.
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