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El Reino Unido alcanzó ayer la temperatura más alta de su historia en el aeropuerto de Heathrow, al suroeste de Londres, donde se registraron 37'9 grados centígrados a las 13.50 h. GMT, según anunció el Centro Meteorológico de la capital británica.

La temperatura que ayer marcó el termómetro batió el récord que tenía el país, 37'1 grados registrados el 3 de agosto de 1990 en Cheltenham, en Gloucestershire (sur de Inglaterra). Además, el Reino Unido vive en estos momentos el tercer verano más caluroso desde que empezó a llevarse un registro de los cambios meteorológicos, en 1659.

El verano de 1976 fue el más caluroso, con quince días seguidos a 32 grados de temperatura. El segundo verano más caluroso fue en 1995. La ola de calor ha cambiado el paisaje e incluso las costumbres de los británicos.

Las playas y los parques de todo el país están llenos a rebosar y el consumo de helados se ha disparado, así como el de cerveza. Se calcula que este fin de semana se han concumido tres millones de pintas, más de lo que sería normal en esta época del año.

Por otra parte es EspañaLas temperaturas seguirán estables, con valores entre los 42 grados de máxima y los 24 de mínima en el interior de Andalucía y en Extremadura, aunque la tendencia es que dentro de unos ocho ó diez días comiencen a suavizarse por el Norte, según indicaron ayer fuentes del Instituto Nacional de Meteorología (INM).