El portavoz del Gobierno, Eduardo Zaplana, y la ministra de Sanidad, Ana Pastor.

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EPR-MADRID
El Consejo de Ministros aprobó ayer un Real Decreto por el que se da luz verde a la implantación de la tarjeta sanitaria individual, un instrumento válido para todo el Sistema Nacional de Salud (SNS), con el que se pretende facilitar el acceso de los ciudadanos a las prestaciones sanitarias en los distintos Servicios de Salud de las comunidades autónomas.

De esta forma, Sanidad asignará un código de identificación único para cada paciente, válido para toda la vida, y que posibilitará la búsqueda y consulta de su información clínica en todo el sistema sanitario público. En cualquier caso, se garantizará la «autenticidad, integridad y confidencialidad» de los datos según la materia vigente en materia de protección de datos de carácter personal.

El nuevo sistema de tarjeta sanitaria será homogéneo en el conjunto de las autonomías, lo que permitirá a los profesionales sanitarios reconocer a los usuarios de manera uniforme en el conjunto del Estado, gracias a los datos de identificación personal.

Las tarjetas sanitarias antiguas serán sustituidas a medida que vayan caducando, estableciéndose un plazo de un año para que las comunidades autónomas adapten su código de registro e integren sus bases de datos dentro del nuevo sistema. Según explicó la ministra de Sanidad, Ana Pastor, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en este momento «ya hay 11 comunidades autónomas que ya han integrado sus bases de datos».

Para la generación del código de identificación personal único, el Ministerio de Sanidad desarrollará una base de datos de población protegida del SNS, que actuará como sistema de mantenimiento y actualización de datos básicos para todas las comunidades autónomas y otras administraciones competentes en aseguramiento sanitario.