Un camionero pide ayuda a través de su móvil en la carretera que une Girona con Vic.

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Las nevadas en el Pirineo y la Cataluña Central provocaron en la mañana de ayer numerosos problemas en carreteras, vías férreas, escuelas y hospitales, además de en el suministro eléctrico. Aunque la Dirección General de Emergencias y Seguridad Civil de la Generalitat activó la fase de Emergencia 1 del plan NeuCat, los Bomberos no tuvieron que trabajar en ninguna emergencia y sólo realizaron salidas para comprobar el estado de las carreteras y ayudar a las máquinas quitanieves. Algunos hospitales de la provincia de Girona, especialmente los situados en las comarcas del Ripollès, Garrotxa y La Selva, suspendieron sus visitas médicas que ya habían sido programadas por la imposibilidad de algunos pacientes para desplazarse a causa de la nieve.

Unos 7.000 alumnos catalanes se quedaron sin clase debido al temporal, que obligó a cancelar varias rutas escolares y a cerrar numerosos colegios, sobre todo en las comarcas pirenaicas, gerundenses y centrales.

Según informó el Departamento de Enseñanza, en Osona (Barcelona) se suspendieron todas las rutas escolares, y los alumnos que accedieron a pie a las escuelas fueron atendidos en los comedores o los ayuntamientos, mientras que en las comarcas centrales se cerraron hasta 26 centros docentes, lo que afectó a 6.502 estudiantes.

En la provincia de Soria casi 300 escolares de 30 rutas de transporte diferentes se quedaron también sin clase.