El director general de la sección española de Amnistía
Internacional, Esteban Beltrán, afirmó ayer en Madrid, durante la
rueda de prensa de presentación de la campaña 'No más violencia
contra las mujeres', que una de cada tres mujeres en el mundo
sufren golpes y «son forzadas a una relación sexual no deseada o
sometidas a abusos durante sus vidas».
AI calificó ayer de «escándalo universal» la violencia contra
las mujeres, que afecta a 1.000 millones de mujeres, lo que
equivale a una de cada tres mujeres de todo el mundo, y cuyos
protagonistas suelen ser, en su inmensa mayoría, miembros de su
propia familia, fundamentalmente los cónyuges o compañeros.
Según la organización, el hecho de que muchos de estos casos
ocurran en el ámbito privado no exime al Estado de su
responsabilidad de proteger a las mujeres, y lamentó al respecto
que al menos 79 Estados no disponen de ninguna legislación al
respecto y que sólo en 51 países la violación conyugal está
tipificada como delito.
La organización lamentó también que los partidos políticos
españoles no hayan incluido en sus programas electorales el
cumplimiento de los compromisos internacionales asumidos por España
al respecto.
«Por lo general, el que abusa de ellas es un miembro de su
propia familia o un conocido suyo», añadió. Concretamente, hasta un
70 por ciento de las mujeres víctimas de asesinato perecen a manos
de sus cónyuges o compañeros, según datos de la Organización
Mundial de la Salud (OMS) para 2002. En Bangladesh, las mujeres
asesinadas por sus compañeros constituyen el 50 por ciento de todos
los asesinatos. En Zambia, cinco mujeres mueren cada semana en las
mismas circunstancias.
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