La nave realizará un viaje de más de siete mil kilómetros.

TW
0

EFE-CABO CAÑAVERAL
La nave «Messenger» partió ayer en un largo viaje hacia Mercurio, en la primera misión de investigación científica que se realiza en tres décadas al planeta más cercano al Sol.

Pero para llegar hasta Mercurio en 2008, el Messenger deberá realizar una serie de «encuentros cercanos» con otros planetas de los cuales aprovechará su fuerza gravitacional para continuar el viaje.

Un cohete Delta 2 despegó de la estación de Cabo Cañaveral (Florida) llevando la sonda espacial para una misión que investigará la posible presencia de hielo en Mercurio, y estudiará su geología y sus campos magnéticos. La partida ocurrió después de que mejoraran las condiciones del tiempo, que retrasaron el lanzamiento.

Esta es la primera misión a Mercurio desde que la nave «Mariner 10» pasó en tres ocasiones cerca del planeta entre 1974 y 1975.

La sonda está equipada con instrumentos que buscarán una respuesta a interrogantes como el origen de la enorme densidad de Mercurio, su historia geológica, la estructura de su núcleo, la naturaleza de sus campos magnéticos y de los materiales que existen en sus polos.

El viaje, de 7.900 millones de kilómetros, incluye una pasada cerca de la Tierra y dos cerca de Venus. En esa trayectoria y antes de tomar una órbita relativamente fija en 2011 en la que se mantendrá durante un año, la nave deberá realizar tres pasadas frente al planeta. La sonda «Messenger», que pesa 1,2 toneladas, alimenta sus sistemas con energía nuclear y está cubierta de un escudo protector de las altas temperaturas.