El coordinador general de Izquierda Unida (IU), Gaspar Llamazares,
aseguró ayer que la Iglesia española se encuentra «fuera de la
democracia y la Constitución» tras el llamamiento que realizó el
viernes la Conferencia Episcopal para que los funcionarios no
celebren matrimonios entre personas del mismo sexo.
Por eso, pidió al Gobierno avanzar en la separación entre Iglesia y
Estado, anulando los acuerdos con la Santa Sede y dando pasos en la
autonomía financiera de esta institución. Concluyó exigiendo que se
saque la doctrina religiosa de las escuelas, y se avance en el
laicismo.
Durante su discurso inicial en el marco del Consejo Político
Federal de IU, el líder de IU dijo que las declaraciones del
portavoz de la Conferencia Episcopal sitúan a la jerarquía
eclesiástica «fuera de la democracia» porque «plantean la
desobediencia a leyes aprobadas y el desacato a lo respaldado por
el Congreso».
También dijo que la Iglesia española se sitúa al margen de la
Constitución y que «la moral de la Iglesia no es la moral del
Estado y no determina las leyes civiles».
La Federación Española de Lesbianas, Gays, Bisexuales y
Transexuales (Colegas) consideró asimismo que la Conferencia
Episcopal está fuera de la realidad, tras su rechazo al proyecto de
ley de matrimonios homosexuales y apelar a la objeción de
conciencia, pero cree que «al final tendrá que entrar por el
aro».
En la inauguración de las XI Jornadas Nacionales de Colegas en
Sevilla, el secretario de organización de esta federación, Pablo
Morterero, calificó como «una nueva vuelta de tuerca» de la
Conferencia Episcopal su advertencia de que los católicos no pueden
votar a favor de esa norma y su llamamiento a alcaldes, concejales,
jueces y funcionarios para que no celebren matrimonios.
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