TW
0

La publicación en la prensa italiana de comentarios acerca de una presunta relación sentimental entre dos ministros del Gabinete ha causado un fuerte revuelo y críticas a quien se han hecho eco de algunos rumores.

El caso pone en entredicho a un sector de la prensa italiana, criticado por otro por haber dado cabida en sus páginas a la hipótesis de ese vínculo sentimental.

Los protagonistas del «enredo mediático» son el ministro de Exteriores, Gianfranco Fini y la de Igualdad de Oportunidades, Stefania Prestigiacomo, que han tenido que aparecer públicamente para negar cualquier verosimilitud a la noticia.

Desde hace días el rumor ha aparecido, disimulado y con alusiones veladas, en varias publicaciones, aunque el desmentido formal de ambos ha terminado por llevarse, ayer, a las primeras páginas de varios diarios, con foto de archivo de los dos ministros en un acto público.

A pesar de que una parte de la prensa se ha mostrado crítica con los que se encargaron de airear inicialmente el asunto, ahora casi todos lo han asumido y dan cuenta del rumor y del desmentido, así como de una serie de reacciones que el caso ha suscitado entre representantes de la política y los medios de comunicación.

Se trata de un comportamiento habitual en la prensa italiana, que a veces se rasga las vestiduras por la publicación ajena de noticias, pero que termina por adentrarse en la misma senda, aunque con algún apunte crítico para la competencia.

Más allá de si la noticia tiene fundamento o no algunos analistas consideran que el origen está en la reciente decisión de Gianfranco Fini de acudir a votar en el referéndum sobre fecundación asistida que se celebrará en Italia el 12 y 13 de junio.