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El municipio de Sant Antoni dispondrá en un futuro de una estación de vigilancia y control de la calidad del aire. El pasado jueves el pleno de este Ayuntamiento dio el visto bueno al convenio de colaboración con la Conselleria balear de Medi Ambient a través del que la corporación cede al Govern un terreno en la zona deportiva de Can Coix para albergar esta instalación, cuya función será medir automáticamente y de forma continuada la presencia de una serie de contaminantes atmosféricos como óxidos de nitrógeno, ozono o dióxido de azufre, teniendo en cuanta la normativa comunitaria y española sobre la calidad del aire.

El concejal de Medio Ambiente de Sant Antoni, Jose Ramón Serra, explicó que «el Ministerio de Medio Ambiente será quien haga la estación y durante el primer año su mantenimiento y control correrán a cargo de la empresa que la construya, después será el Govern quien lleve la gestión de la instalación, mientras que la administración municipal se encargará de aspectos como el pago de la electricidad, las comunicaciones o la limpieza».

La estación se materializará en una caseta de pequeñas dimensiones que dispondrá, además de los equipos mecánicos y electrónicos de medida de contaminantes, de una estación meteorológica para determinar la velocidad y la dirección del viento, la temperatura ambiental, la humedad relativa, la radiación solar, las precipitaciones y la presión atmosférica. Asimismo, la construcción dispondrá de un ordenador central desde el que se transmitirá toda la información recogida a la base de datos de la Conselleria balear de Medi Ambient, al Ministerio de Medio Ambiente y al propio Ayuntamiento de Sant Antoni. Está previsto hacer instalaciones de este tipo también en Mallorca y Menorca. A finales del año pasado, el Govern balear ya colocó en Sant Antoni una estación provisional de control de la calidad del aire en la misma zona donde se levantará la nueva construcción, que ocupará una superficie aproximada de 16 metros cuadrados.

El convenio para hacer realidad este proyecto fue respaldado por los concejales del ejecutivo local y el grupo progresista, mientras que Democracia Pitiusa se abstuvo.