Según explicó este cuerpo a través de una nota de prensa, la detención se produjo cuando M.F.G. se presentó de manera voluntaria reconociendo los hechos después de que se iniciaran las investigaciones. A su vez, el juzgado de Instrucción número 1 había tramitado un atestado como consecuencia de la denuncia presentada por los dueños del local tras el incendio.
Según ha podido determinar la policía, el detenido estuvo la madrugada del día del incendio en el club de alterne «Venus Cabaret» bebiendo unas copas hasta alcanzar el estado de embriaguez. Supuestamente, clientes y trabajadores del local observaron que M.F.G. mostraba un comportamiento pendenciero en el establecimiento, aunque los hechos no revistieron gravedad.
Presuntamente, M.F.G. se fue del club y esperó en las inmediaciones a que el local cerrase. Después, siempre según la versión policial, regresó de nuevo al club y le prendió fuego a la puerta de entrada y las llamas se propagaron hacia el interior afectando a las cortinas, las paredes y las máquinas tragaperras, así como la fachada exterior. Afortunadamente no hubo que lamentar daños personales puesto que el local se encontraba cerrado en el momento del siniestro. Antes de que M.F.G. se presentara en la Comisaría y reconociera los hechos, los agentes mantenían abierta una investigación puesto que todo indicaba que el fuego había sido provocado por la manera en la que se propagó de fuera hacia dentro y porque los bomberos indicaron que la puerta presentaba signos de haber sido forzada.
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