Velas e imágenes acompañan a una foto de Eluana en el exterior de la clínica de Udine, donde falleció el domingo. Foto: DANIEL RAUNIG/REUTERS

TW
0

OTR/PRESS-ROMA

Tan sólo un día después de la muerte de Eluana Englaro, la mujer italiana que pasó 17 años en estado vegetativo, el Senado italiano aprobó, con 164 votos a favor, 100 en contra y una abstención, una moción que obliga a alimentar e hidratar a las personas que no puedan hacerlo por sí mismas. Esta moción fue presentada por el partido del primer ministro, Silvio Berlusconi, quien considera que Englaro «no ha muerto de forma natural» sino que «ha sido asesinada».

Por otro lado, el Senado rechazó con 109 votos a favor, 151 en contra y 14 abstenciones, la moción del Partido Demócrata que pedía que esta alimentación e hidratación se apliquen sólo si el interesado no ha pedido expresamente en su testamento biológico que sean interrumpidas.

La aprobación va en línea con la petición de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI) de una «ley justa» sobre el testamento vital. La muerte de Eluana «no ha sido natural, la ha matado quien la ha privado de comida y agua», afirmó el Servicio de Información Religiosa (SIR) de la Conferencia Episcopal Italiana, que se unió a las críticas por el fallecimiento de la joven.

Por su parte, la Justicia italiana ordenó ayer la realización de la autopsia al cadáver de Eluana Englaro para esclarecer las causas de su muerte a causa de una «crisis imprevista». Los médicos que la atendían habían descrito su estado como «estable» y habían señalado que la enferma podría haber aguantado, al menos, dos semanas más, dadas sus buenas condiciones físicas.

Ante esta situación, el fiscal general de Trieste, Beniamino Deidda, aseguró que hasta el momento no tienen noticia de que se haya cometido ningún delito. Sin embargo, el neurólogo de la universidad de Udine, Gianluigi Gigli, pidió «esclarecer enseguida» las circunstancias de la muerte. El Colegio de Médicos de Udine ha abierto un procedimiento disciplinario al equipo sanitario que la ayudó a morir. El presidente de ese colegio, Luigi Conte, explicó que se trata de un «procedimiento rutinario» cuando ocurren estos casos. El periódico conservador italiano Libero no dudó sugerir que Eluana había sido asesinada «a toda prisa».

Precisamente, Berlusconi aseguró que Eluana «no ha muerto de muerte natural» sino que «ha sido asesinada». En este sentido, lamentó que Eluana muriera «mientras los parlamentarios discutían sobre la constitucionalidad de un diseño de ley del Gobierno». «Ahora que Eluana está muerta, estoy tranquilo porque he hecho lo que tenía que hacer. Otros, no lo sé», añadió antes de acusar al presidente de la República, Giorgio Napolitano, de haber «cometido un grave error».