Tiene mucho mejor aspecto y lo cierto es que sin lugar a dudas estar con la familia será perfecto para Joaquín de Dinamarca. El príncipe sufrió recientemente un ictus del que tuvo que ser operado de urgencia con cirugía cerebral y por fin ha reaparecido.
El heredero, Federico de Dinamarca, ha decidido viajar y visitar a su hermano para comprobar su estado de salud y cómo se encuentra durante la recuperación, después de tres semanas desde que tuviese lugar la intervención, tal y como ha informado la casa real del país escandinavo.
«El príncipe heredero regresó ayer a casa desde Francia, donde los últimos días ha visitado a su hermano, el príncipe Joaquín, a la princesa María y a sus dos hijos en el castillo de Cayx. El príncipe Joaquín continúa mejorando pero necesita aún tranquilidad», ha escrito la cuenta de Instagram de la monarquía danesa.
Adjunto al comunicado se puede ver la esperada fotografía de los dos hijos de Margarita II sentados tomando el desayuno en la terraza del castillo, que se encuentra en la parte norte de Francia y que ha sido durante años la residencia de verano de la familia real de Dinamarca.
A sus 51 años, Joaquín de Dinamarca, sexto en la línea de sucesión al trono, fue dado de alta once días después de la intervención en el Hospital Universitario de Toulouse, al sur de Francia, de la que según los doctores no le quedarán secuelas físicas importantes
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