En los últimos años, uno de los conceptos más innovadores ha sido el de los mercados gastronómicos. A Palma llegó, al inicio del verano de 2015, el Mercado de San Juan, con la conversión de unos amplios locales en s'Escorxador. Sus 1.300 metros cuadrados son propiedad de Mercasa, una empresa pública de la Administración del Estado. Junto con el Ajuntament de Palma gestiona el local y fue arrendado en un contrato de siete años a un grupo de empresarios, entre los que aún se encuentra el constructor Gabriel Català.
El local contó en su inicio con 18 puestos de diferentes opciones culinarias en los que había dos máximas: la calidad y la no repetición de concepto culinario. Tras unos primeros dos años espectaculares, el local ha tenido diversos altibajos y por su dirección general han pasado diferentes personas. Además, no han sido pocas las quejas por el alquiler de cada puesto, que rondaba los 5.000 euros mensuales, lo que repercutía en que tampoco fuera un lugar accesible a todos los bolsillos.
Continuidad
Desde el inicio de la pandemia el Mercado de San Juan está cerrado a cal y canto. Algunos de sus inquilinos ya han manifestado su disposición a continuar cuando todo vuelva a la normalidad, pero tampoco faltan los que ya no seguirán con este negocio. Lo que parece seguro, a decir de uno de los empresarios que más involucrado estuvo en la primera etapa de este negocio, es que Mercasa no dejará caer el local y que seguirá funcionando en un futuro que dictará la situación sanitaria.
Dos años más tarde, en el verano de 2017, abría sus puertas el Mercat 1930, con un concepto parecido y en el que el turista, dada su situación en pleno Passeig Marítim, era el cliente más asiduo, aunque el residente tampoco ha desdeñado esta oferta gastronómica, que también empezó fuerte y después ha tenido altibajos. El auge del Tardeo, que comenzó en Santa Catalina y en los últimos años había llegado al Marítim, les trajo una nueva clientela, sobre todo local. A pesar de la dificultad, también se da por seguro que volverá a abrir. Mientras tanto, siguen abiertos Santa Catalina y el Mercat de l'Olivar, cada día más gastronómicos y menos tradicionales.
Al margen de el destrozo de la pandemia para todos nuestros hosteleros (tienen todo mi apoyo), en el análisis del futuro incierto de los mercados gastronómicos tde Palma también debería considerarse el establecimiento de precios abusivos y un (equivocado) concepto de pinchos y tapas que nunca fueron objeto de lujo... En mis últimas visitas a San Juan, abundaban los comensales extranjeros y eché de menos a amigos con los uqe tiempo atrás coincidía allí... La política del sablazo, llega a cansar.
Para "BARRA", es duro pero es rentable si lo gestionas bien. Por ejemplo, en este mercado hay muchísimas más mesas que en el de San Miguel de Madrid. En cuestión de espacio y comodidad lo supera!
Pero ya he dicho antes que la limpieza brillaba por su ausencia y yo he visto cosas que han hecho que no vuelva.
El de Madrid es muy caro pero es que la calidad es muy buena... había puestos de mariscos, de jamón ibérico, carnes buenas, especialidades en bacalao, chocolates especiales, etc, que quitaban el hipo.
Un capricho nos lo merecemos de vez en cuando.
El mercado de San Juan fue muy buena idea y sale rentable si vendes lo que "vendes", nunca mejor dicho, pero los puestos nunca se renovaron gastronómicamente hablando y daban opciones que podías encontrar en cualquier restaurante.
Fue y es una gran idea y me gustaría que se abrirá de nuevo con una renovación total.
Porque clientela en Mallorca no falta!!!
Calidad regular y precios desorbitados. Recuerdo que tuve que dejar un trampó porque no sabía a nada. Pero cómo puede salir mal un trampó??? Y no digamos la parada de cocina mallorquina tradicional que ofrecía pisto.
Esconderse detrás de un nombre y presentarse como cocineros artistas gracias a Dios es un fracaso la cocina es simple y fácil un buen ARTESANO cocinar buenos productos con tiempo paciencia buen trato y respeto al cliente
Remontar a principios de mes un - 5000 € es muy, pero que muy duro. Le sumamos que este mercado es "nocturno" en su 90%, y que no tienes un local enorme, donde ubicar muchas mesas, si no más bien algo pequeñito con un máximo de salida de platos diarios. Rentable? PARA NADA !!!
Lo que es una autentica estupidez y la gente se ha dado cuenta, es que cuando ibas a ese ¨mercado gastronómico´, te tomabas una tapa y una cerveza y salías con 10 euros menos y a eso se le llama robo en toda la cara.
Una imitación pobre del Mercado de San Miguel de Madrid.
5000€ al mes por alquilar un chiringuito en un mercado. Y todo para que ganen dinero constructores y el ayuntamiento. Y dicen que hay quien quiere seguir con esto.¿Es que nadie se ha dado cuenta de la cantidad ingente de dinero que va a haber de menos este invierno en Baleares? Si nadie se lo imagina, que espere un mes o dos...
10 comentarios
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Al margen de el destrozo de la pandemia para todos nuestros hosteleros (tienen todo mi apoyo), en el análisis del futuro incierto de los mercados gastronómicos tde Palma también debería considerarse el establecimiento de precios abusivos y un (equivocado) concepto de pinchos y tapas que nunca fueron objeto de lujo... En mis últimas visitas a San Juan, abundaban los comensales extranjeros y eché de menos a amigos con los uqe tiempo atrás coincidía allí... La política del sablazo, llega a cansar.
Para "BARRA", es duro pero es rentable si lo gestionas bien. Por ejemplo, en este mercado hay muchísimas más mesas que en el de San Miguel de Madrid. En cuestión de espacio y comodidad lo supera! Pero ya he dicho antes que la limpieza brillaba por su ausencia y yo he visto cosas que han hecho que no vuelva. El de Madrid es muy caro pero es que la calidad es muy buena... había puestos de mariscos, de jamón ibérico, carnes buenas, especialidades en bacalao, chocolates especiales, etc, que quitaban el hipo. Un capricho nos lo merecemos de vez en cuando. El mercado de San Juan fue muy buena idea y sale rentable si vendes lo que "vendes", nunca mejor dicho, pero los puestos nunca se renovaron gastronómicamente hablando y daban opciones que podías encontrar en cualquier restaurante. Fue y es una gran idea y me gustaría que se abrirá de nuevo con una renovación total. Porque clientela en Mallorca no falta!!!
Calidad regular y precios desorbitados. Recuerdo que tuve que dejar un trampó porque no sabía a nada. Pero cómo puede salir mal un trampó??? Y no digamos la parada de cocina mallorquina tradicional que ofrecía pisto.
Esconderse detrás de un nombre y presentarse como cocineros artistas gracias a Dios es un fracaso la cocina es simple y fácil un buen ARTESANO cocinar buenos productos con tiempo paciencia buen trato y respeto al cliente
Calidad normal a precio de estrellas michelin.Para guiris y algun despistado.
Remontar a principios de mes un - 5000 € es muy, pero que muy duro. Le sumamos que este mercado es "nocturno" en su 90%, y que no tienes un local enorme, donde ubicar muchas mesas, si no más bien algo pequeñito con un máximo de salida de platos diarios. Rentable? PARA NADA !!!
Lo que es una autentica estupidez y la gente se ha dado cuenta, es que cuando ibas a ese ¨mercado gastronómico´, te tomabas una tapa y una cerveza y salías con 10 euros menos y a eso se le llama robo en toda la cara. Una imitación pobre del Mercado de San Miguel de Madrid.
"Reflexiones", creo que el mercado es de gestión privada... Por otra parte, al principio bien, pero luego fallaba la limpieza...
Chiringuitos para pijos aburridos y güirís perdidos por palma caro y malo
5000€ al mes por alquilar un chiringuito en un mercado. Y todo para que ganen dinero constructores y el ayuntamiento. Y dicen que hay quien quiere seguir con esto.¿Es que nadie se ha dado cuenta de la cantidad ingente de dinero que va a haber de menos este invierno en Baleares? Si nadie se lo imagina, que espere un mes o dos...