Una de las estampas típicas del verano, bucear y observar el paisaje marino. | Pixabay

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Una de las estampas por excelencia del verano son los días de playa y los chapuzones en el mar: relajarse buceando o haciendo snorkel. Sin embargo, la distensión se puede ver truncada por los nervios que produce cuando se empañan las gafas. ¿Por qué pasa? ¿Qué haces mal? Lo cierto es que es un proceso muy común y natural. Este vaho son microscópicas gotas de agua, que se forman al condensarse el aire del interior, debido a la diferencia de temperatura entre la lente y el agua. Esto se puede solventar de manera fácil, creando una pequeña película sobre la lente y evitando así que las gotas lleguen a condensarse en el cristal. Hay distintas formas de conseguirlo -algunas de ellas muy sencillas-. Aquí te proponemos las cinco más comunes entre los buceadores:

1. Saliva

Aunque cueste creerlo, es uno de los remedios más sencillos y efectivos. Con la máscara de buceo seca, escupe sobre ella y esparce el líquido con el dedo. Incluye unas gotas de agua -dulce, no del mar- y esparce nuevamente la sustancia sobre las gafas. Antes de empezar a bucear, deja caer el líquido restante antes de colocártelas.

2. Con agua y jabón

Limpia los cristales con agua y un chorrito de jabón (el lavavajillas, el mismo que utilizas para limpiar las sartenes). Frota hasta que no quede nada de suciedad y aclara con agua. Es importante que no sea a presión, como del grifo o de la ducha. Por contra, las puedes sumergir en un barreño.

3. Pasta de dientes

Este truco es similar a los anteriores, pero con la única singularidad de que en lugar de utilizar jabón, el elemento para limpiar los cristales es la pasta de dientes. Aplica un poco de sustancia sobre el cristal, junto con un chorro de agua y frota bien hasta limpiar las gafas. Por último, enjuágalas con abundante agua y asegúrate de que no quedan restos de pasta de dientes que después te puedan molestar a la hora de sumergirte. Deja un poco de agua dentro y retíralo justo antes de meterte en el mar. Un remedio original, pero eficaz, aunque, como todo, no infalible.

4. Spays antivao

Si la playa, el buceo o el snorkel es una de tus grandes pasiones en verano y te molesta sumamente cuando se te empañan las gafas, puedes recurrir a los sprays antivao. Son útiles y generan un película que impide la aparición de las gotitas de agua. Los puedes encontrar en Amazon por menos de 10 euros.

5. La patata

Aunque no lo creas, muchos buceadores confirman que restregar una patata sobre los cristales de las gafas impide que se empañen, pues forma una capa de almidón que impide adherirse a las gotas. Deja secar la capa, enjuaga los cristales y ¡a bucear!