Ver las imágenes sin contexto alguno estremece. En las últimas semanas se vienen intensificando las protestas virales en museos, arrojando desde puré de verduras a un Van Gogh en Roma hasta salsa de tomate sobre La joven de la perla, de Johannes Vermeer, en el museo Mauritshuis, en La Haya. El último de los acto ha ocurrido este sábado al mediodía en el museo de El Prado, en Madrid, cuando dos activistas se han pegado con pegamento a La Maja Vestida y La Maja Desnuda de Goya. Han escrito en la pared «+1.5°» en referencia al anuncio de la ONU de la imposibilidad de cumplimiento del Acuerdo de París. Son miembros de distintas organizaciones ecologistas, que utilizan este tipo de acciones para, según defienden: «Concienciar sobre el cambio climático». Pero, ¿quiénes son exactamente? ¿Quién los financia?
Lo que fue la iniciativa de un grupo, la han ido reproduciendo en las últimas semanas distintos colectivos ambientalistas, siendo Just Stop Oil, de las organizaciones que más actos del estilo ha protagonizado. Su objetivo principal, según publicó El Plural, es que Reino Unido detenga todas las licencias para la producción combustibles fósibles en todo su territorio. Acerca de su sustento económico, el mismo medio apunta que estarán financiados por Fondo de Emergencia Climática, una organización de Estados Unidos fundada en 2019 por multimillonarios y que financia a un total de 39 grupos activistas. Una de sus principales integrantes es Aileen Getty, nieta del magnate del petróleo J. Paul Getty.
Otro de los grupos ecologistas y que, según fuentes gubernamentales a las que ha tenido acceso Europa Press, estarían detrás de lo sucedido este sábado en Madrid con los cuadros de Goya sería Futuro Vegetal. El grupo, de origen español se define en su página web como: «Un colectivo de desobediencia civil y acción directa que lucha contra la Crisis Climática mediante la adopción de un sistema de agroalimentario basado en plantas». En Alemania, destaca la organización Letzte Generation, asociación ecologista detrás de tirar puré de patatas en sobre el cuatro El Sembrador de Van Gogh, expuesto en el museo del Palacio Bonaparte de Roma. En concreto, estos son los principales actos vandálicos -o reivindicaciones virales- que han ocurrido en las últimas semanas:
9 de octubre de 2022. Dos activistas de Extinction Rebellion (movimiento social mundial cuyo objetivo es influir sobre los gobiernos del mundo y las políticas medioambientales) pegaban su mano en el cuadro Masacre en Corea de Pablo Picasso expuesto en un museo de Melbourne, Australia.
14 de octubre de 2022. Dos activistas de la organización Just Stop Oil arrojan sopa de tomate sobre el cuadro Los Girasoles, de Vincent Van Gogh, en Londres.
23 de octubre de 2022. Miembros de Last Generation tiran puré de patatas a Meules, de Claude Monet, en el Museo Barberini, en Potsdam, Alemania.
4 de noviembre de 2022. Ecologistas de Las Generation arrojan puré de verduras al cuadro El Sembrador, de Van Gogh, expuesto en el Palacio Bonaparte, en Roma.
5 de noviembre de 2022. Dos jóvenes de Futuro Vegetal se pegan a La Maja Vestida y La Maja Desnuda de Goya en el museo de El Prado, en Madrid.
15 comentarios
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Ramón García👏👏👏👏👏 És pot dir més alt, operò no més clar. Jo simplement hi afegiria aquella frase de Malcom X que deia: "Si no estau previnguts enfront dels mitjans de comunicació us faran estimar l'opresor i odiar a l'oprimit" i en aquestes estam...
Que dolents que són. Mira que voler conscienciar sobre la importància del problema que ens extingirà. Els cuadres són molt més importants que el clima. Salutacions des de la platja en ple novembre
Es como si para concienciar y protestar por el sistema de pensiones, se dedicaran a pegar a viejas por la calle.
No se entiende porqué los servicios de seguridad no los detienen y echan al momento de iniciar la payasada. Y si no tiene autoridad que les den un babero y una escoba...
Ramón García¿Supuesto acto vandálico?, ¿supuesto? Háztelo mirar.
Lo único que logran es antipatía. ¿Qué demonios van a conseguir atacando al patrimonio cultural? Mi despreció, desde luego.
Con la comida no se juega y menos se desperdicia.
Entiendo el fondo pero no las formas; por qué el objetivo tienen que ser obras de arte? Son patrimonio de todos, la respuesta ciudadana general es de repulsa, sin poner atención a su mensaje. Así, solo van a conseguir que entrar a un museo sea incomodo y lento con la cantidad de controles y condiciones que aplicarán a partir de ahora.
Ramón GarcíaCuanta palabrería para no decir nada útil. Dinos a quién tenemos que votar (Pacma o lo que sea) y corta el rollo. Si esos chavales saben mejor que todo el gabinete del gobierno cómo afrontar el cambio climático, mejor nos quedamos en casa en las próximas elecciones.
Agenda 2030